LA LEYENDA DE NAYMLAP
Una de los relatos más importantes del Perú precolombino es sin duda el de Naymlap, personaje que viniendo por mar en una gran flota de balsas, arriba a las costas lambayecanas.
Establecido a poca distancia de la playa, inicia un linaje de larga data y contribuye de manera decisiva al desarrollo cultural de esta parte de la costa norte del Perú. Su origen es discutido y los especialistas no se ponen de acuerdo al señalar su lugar de procedencia.
Aunque en el relato se indique que vino desde la parte “suprema”, que fuera entendida como el norte y por ende, procedería de territorios ecuatorianos u otros más distantes, también se indica que en tiempos coloniales, la parte “suprema” hacía referencia a territorios hacia el sur, por tanto, Naymlap procedería de algún valle al sur de territorio lambayecano. De todos modos, lo que es evidente, es que luego del colapso de los tiempos Moche, alrededor de los años 600 a 700 d.C. ocurre una época de crisis que originó cambios muy importantes.
Los mitos dan primacía al dios Pachacámac sobre el ancestral dios Kon de los Moche y la costumbre de enterrar a los difuntos cambian notoriamente: La vieja posición decúbito dorsal y con la cabeza hacia el norte, cede ante la nueva modalidad de entierro sentado y flexionado.
En 1586 el cronista español Miguel Cabello de Balboa registra el relato de Naymlap, uno de los más importantes del Perú en la localidad de Túcume, por medio de un principal llamado Martín Farro Chumbi. Doscientos años después Dn. Modesto Rubiños y Andrade cura de Pacora, un pequeño poblado al norte de Túcume, registra este mismo relato sin variaciones significativas. Sin embargo, el nombre del personaje que él registra tiene dos voces de la lengua muchik que eran: Ñam (ave) y La (agua). Ñam La o Naymlap refiere entonces a un ave marina. El mar adquiere así un significado ancestral de mucha importancia.
Por ello es que en general, en la iconografía de este desarrollo cultural, el mar, olas, peces, aves marinas, embarcaciones, conchas Spondylus, etc. tienen un protagonismo especial.
“Dicen los naturales de Lambayeque (y con ellos conformaban los demás pueblos a este valle comarcanos) que en tiempos muy antiguos que no saben numerarlos vino de la parte suprema de este Pirú con gran flota de balsas un padre de campañas.
Hombre de mucho valor y calidad llamado NAYMLAP y consigo traía muchas concubinas más la mujer principal dice haberse llamado CETERNI trajo en su compañía muchas gentes que ansi como capitán y caudillo lo venían siguiendo, lo que entre ellos tenia mas valor eran sus oficiales que fueron quarenta...”
Sus sirvientes personales fueron:
Sus sirvientes personales fueron:
XAM-MUCHEC: encargado de las unciones y color del rostroOLLOPCOPOC: encargado del bañoPITASOFI: era su trompeteroÑINACOLA: cuidaba sus andas y sillasFONGA SIGDE: que derramaba polvos de conchas al paso del señorLLAPCHILLULI: el sastre que le hacia ropas de plumaNINA GINTUE: a cargo de la bebida, yOCCHOCALO: su cocinero
Al arribar a la costa en la desembocadura del río llamado Faquisllanga, se adentró unas leguas en el valle y construyó un palacio para su mujer principal y un templo al que le llamó Chot en el que colocó un ídolo que traía consigo al que llamaban Ñampayec que significaba “retrato de Ñam La”. De allí procede la palabra actual “Lambayeque” para esta región y la cultura post Moche que aquí se desarrolló. “Después de vivir muchos años... le vino el tiempo de su muerte y porque no entendieran sus vasallos que tenia la muerte jurisdicción sobre él, lo sepultaron escondidamente y publicaron que le salieron alas y...desapareció...”
Al morir NAYMLAP su progenitor CIUM se casó con ZOLSOLOÑI y tuvo doce hijos varones. Durante la vida de CIUM hijo heredero de NAYMLAP (y segundo señor de estos valles) se apartaron sus hijos a ser principios de otras familias y poblaciones uno llamado NOR se fue al valle de Cinto y CALA fue a Túcume y otro a Collique y otros a otras partes.
LLAPCHILLULI fue a Jayanca: Y habiendo vivido muchos años este CIUM se metió en una bóveda soterriza y allí se dejo morir .. por fin y por su muerte de este gobernaron diez reyes siendo FEMPELLEC el último gobernante de la dinastía.
La historia dice que cometió pecado al intentar sacar el ídolo LLAMPALLEC del lugar en donde Ñam La lo colocó. Además, el demonio se le apareció en forma de una bella mujer que lo sedujo. Luego de ceder a tan maligna tentación vino una época de grandes calamidades.
El cronista dice “ .. y que acabado de perpetuar ayuntamiento tan nefando comenzó a llover (cosa que jamás se habían visto en estos llanos) y duro este diluvio treinta días a los cuales sucedió un año de mucha esterilidad y hambre...” Los sacerdotes entendieron que había culpa en su señor por sacrilegio y lo responsabilizaron de los padecimientos de su pueblo.
Hallándole culpa los sacerdotes movilizaron al pueblo y pidieron castigo para conjurar la ira de su ídolo. Tomándole prisionero lo ataron de pies y manos y lo arrojaron a las profundidades del mar, quedando la región sin rey ni señor. Así pasó mucho tiempo hasta que el tirano todo poderoso señor CHIMO CAPAC se apoderó de este valle, encargándole su gobierno a PONGMASA al que le sucedió PALLESMASA y luego OXA, tiempo en que los Incas habían llegado a Cajamarca.
Luego de la conquista de TUPAC INCA YUPANQUI se sucedieron 6 gobernantes cuyos nombres fueron: LLUMPISAN, CHULLUMPISAN, CIPROMARCA, FALLEMPISAN, EFQUEMPISAN y SECFUMPISAN.
Esta época tan convulsionada culminó con la llegada de los españoles. PIZARRO y sus huestes a partir de mayo de 1532 habían comenzado a desplazarse desde Tumbes. En su recorrido tiene noticias de los éxitos de ATAHUALPA en la guerra que sostenía con su hermano HUASCAR. Es bien recibido por CAJUSOLI cerca de Jayanca y enrumba a Cajamarca.
Tras el tiempo de Pizarro y la muerte de ATAHUALPA, se consolida la conquista y colonización del Perú. Imponiéndose el nuevo orden, las grandes ciudades bajo administración Inca fueron abandonadas.